¿Qué son las CBDCs?
Las Monedas Digitales de los Bancos Centrales, CBDCs, por sus siglas en inglés, son monedas digitales emitidas por bancos centrales con el objetivo de complementar o reemplazar el dinero tradicional. Están completamente centralizadas y respaldadas por la autoridad monetaria del estado, lo que asegura su estabilidad y aceptación como medio de pago legal. A diferencia de las criptomonedas basadas en tecnologías descentralizadas y distribuidas, las CBDCs utilizan sistemas centralizados que permiten a los bancos centrales mantener control total sobre su emisión, regulación y trazabilidad.
Las CBDCs están en el centro de un debate global por su potencial para transformar el sistema financiero tradicional. Sin embargo, más allá de las promesas de eficiencia, estas monedas digitales plantean serias inquietudes sobre el control social y la erosión de las libertades individuales.
Crítica al potencial autoritario
El temor principal con las CBDCs es que podrían evolucionar hacia herramientas de autoritarismo, alineando el poder económico con capacidades ampliadas de vigilancia y control por parte del estado. Por ejemplo, sistemas como el crédito social en China, que integran la evaluación financiera con la conformidad social y moral, podrían expandirse bajo el amparo de las CBDCs, permitiendo a los estados condicionar el acceso a servicios financieros según la alineación de los ciudadanos con políticas estatales.
Riesgos de discriminación y restricciones financieras
Las CBDCs podrían permitir un nivel sin precedentes de control sobre las transacciones financieras de los individuos. Desde la prohibición de comprar ciertos bienes hasta la exclusión financiera de grupos específicos, las CBDCs podrían amplificar las desigualdades sociales y vulnerar los derechos individuales.
Prohibición y limitación de transacciones
Las CBDCs permitirían a los estados programar y restringir cómo se gastan los fondos, pudiendo bloquear compras de productos específicos o servicios, lo que se asemeja a una forma de censura financiera. Este control programable de las transacciones personales refuerza la capacidad del estado para imponer normas sociales a través de medios económicos.
Transparencia total y vigilancia estatal
Una característica inherente de las CBDCs es la capacidad del estado de acceder y monitorear todas las transacciones financieras, transformando el sistema monetario en una herramienta de vigilancia masiva. Esta transparencia absoluta podría ser utilizada para rastrear comportamientos y asociaciones, poniendo en riesgo la privacidad y libertades civiles.
Control fiscal directo y manipulación monetaria
Con las CBDCs, el gobierno no solo podría gravar directamente las transacciones, sino también implementar tipos de interés negativos para penalizar el ahorro y fomentar el consumo. Esta manipulación directa del comportamiento económico por mandato gubernamental ejemplifica una transición preocupante en el papel del dinero en la sociedad.
Congelación e incautación de activos
La capacidad de congelar o incautar activos con facilidad sería enormemente facilitada por las CBDCs. Esto otorgaría al estado un poder punitivo significativo sobre los individuos, permitiendo sanciones económicas instantáneas y severas contra disidentes o cualquier persona considerada adversa al régimen.
Exclusión de los desfavorecidos
La eliminación gradual del efectivo y la transición hacia las CBDCs podría excluir a segmentos significativos de la población, como las personas sin hogar o aquellos sin acceso a la tecnología necesaria para participar en el sistema financiero digital. Este enfoque podría aumentar las brechas sociales y económicas, creando una clase de ciudadanos financieramente invisibles y, por lo tanto, más controlables.
Tradicionalmente, las monedas ofrecen un cierto grado de anonimato y discreción en cómo y dónde se gasta el dinero. Sin embargo, con las CBDCs, este paradigma podría invertirse completamente, permitiendo a los estados no solo rastrear cada transacción, sino también controlar su propósito y legalidad según criterios que pueden cambiar con el tiempo.
Vulnerabilidades en una sociedad sin efectivo
El avance hacia una sociedad totalmente digitalizada con CBDCs podría incrementar los problemas de seguridad cibernética y privacidad. La dependencia de una infraestructura digital para todas las transacciones financieras podría convertirse en un punto de vulnerabilidad significativo, ya que cualquier fallo o brecha en la seguridad podría tener consecuencias catastróficas para la estabilidad económica y la confianza pública.
Además, la recopilación masiva de datos financieros por parte de una entidad centralizada aumentaría el riesgo de violaciones de privacidad y el potencial abuso de poder por parte de los estados. Esto podría dar lugar a escenarios en los que la información financiera sensible de los ciudadanos se vea comprometida o se utilice indebidamente para fines de vigilancia o persecución.
Postura de reguladores y expertos
Jerome Powell: Presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos
Powell ha señalado que la Reserva Federal está lejos de considerar la implementación de CBDCs, enfatizando que cualquier acción en este sentido se realizaría a través del sistema bancario existente. Powell subraya que no hay planes inminentes para la adopción de CBDCs y tranquiliza al público al respecto.
If we were to ever do something like this, and we’re a very long way from even thinking about it, we would do this through the banking system, the last thing…we the Federal Reserve would want would be to have individual accounts for all Americans.
People don’t need to worry about a central bank digital currency (CBDC). Nothing like that is remotely close to happening any time soon.
We’re nowhere near recommending, let alone adopting, a central bank digital currency in any form.
Eswar Prasad: Experto en Economía Internacional, ex Jefe de la División de Estudios Financieros y de la División de China en el FMI
Prasad advierte sobre las implicaciones de una CBDC totalmente implementada, destacando que los gobiernos podrían excluir financieramente a individuos o grupos enteros con un simple clic, dejándolos completamente desamparados. Además, señala el peligro de que regímenes autoritarios como el de China utilicen las CBDCs para perseguir a disidentes y minorías.
In a fully implemented CBDC system, governments could financially exclude individuals or entire groups of people with the press of a button, leaving them with nothing. Governments like the CCP could target dissidents, sexual minorities, ethnic minorities, or religious minorities. If banknotes don’t exist and access to government‐issued digital cash is revoked, then they are truly helpless.
Christopher Waller: Gobernador de la Reserva Federal
Waller reconoce la lógica detrás de la implementación de CBDCs por parte de China, destacando su capacidad para monitorizar transacciones, imponer tasas de interés negativas y gravar directamente las cuentas de los clientes. Sin embargo, cuestiona por qué los ciudadanos estadounidenses deberían apoyar una medida que podría comprometer su privacidad financiera.
I can see why China would do it. If they want to monitor every one of your transactions, you could do that with a central bank digital currency. You can’t do that with Venmo. If you want to impose negative interest rates, you could do that with a central bank digital currency. You can’t do that with Venmo. And if you want to directly tax customer accounts, you could do that with a central bank digital currency. You can’t do that with Venmo.
I get why China would be interested. Why would the American people be for that?
Agustín Carstens: Director General del Banco de Pagos Internacionales (BPI)
Agustín Carstens, Director General del Banco de Pagos Internacionales (BPI), es una de las pocas voces a favor de las CBDCs, sin pelos en la lengua enfatiza el control absoluto que otorgarían a los bancos centrales sobre las transacciones financieras. Carstens destaca la capacidad de los bancos centrales para establecer reglas y regulaciones y hacerlas cumplir mediante la tecnología, subrayando así la perspectiva de control y supervisión que ofrecen las CBDCs.
We don’t know who’s using a $100 bill today and we don’t know who’s using a 1,000 peso bill today. The key difference with the CBDC is the central bank will have absolute control on the rules and regulations that will determine the use of that expression of central bank liability, and also we will have the technology to enforce that.
Lorenzo Ramírez: Periodista y Experto en Finanzas
Lorenzo Ramírez, periodista y experto en finanzas, cuestiona la noción de que las CBDCs, como el euro digital o el dólar digital, sean simplemente una adición al sistema financiero. En cambio, sugiere que están diseñadas para ejercer un control más estricto sobre las decisiones financieras de los ciudadanos. Ramírez critica la idea de que el uso del euro digital será opcional y coexistirá con el efectivo, argumentando que propuestas como la limitación de pagos en efectivo en Italia indican una clara intención de desincentivar el uso del efectivo.
Además, señala la inclusión de una fecha de caducidad del dinero en la arquitectura tecnológica de las CBDCs, lo que obligaría a gastarlo antes de una determinada fecha.
En resumen, Ramírez sugiere que el verdadero propósito de las CBDCs es utilizar el ahorro de las personas de manera forzosa para estimular la economía, revelando así una faceta menos benigna de estas monedas digitales. Esta perspectiva ofrece un contrapunto crítico a la visión más convencional de las CBDCs como simples herramientas de modernización del sistema financiero.
Estrategias de implementación
Ante la falta de mejoras sustanciales, surge la pregunta: ¿Quién adoptaría voluntariamente esta herramienta de control? ¿Qué argumentos pondrían sobre la mesa para que la gente abrace una medida que no ofrece beneficios tangibles?
Aquí mencionamos algunas estrategias que podrían utilizar para lograrlo:
- Quiebras del sistema bancario: En situaciones de crisis financiera o quiebras bancarias, los gobiernos podrían presentar las CBDCs como una solución segura y estable para evitar el colapso económico. La necesidad de estabilidad financiera podría impulsar a la población a adoptar estas nuevas formas de moneda digital.
- Implementación de la Renta Básica Universal: Los gobiernos pueden empezar a implementar la renta básica universal en forma de CBDCs para grupos vulnerables y dependientes. Al hacerlo, se podría incluir a una gran parte de la población, facilitando una adopción masiva de las CBDCs.
- Pago de pensiones y salarios públicos: Pueden también optar por pagar pensiones y salarios del sector público en forma de CBDCs. Esta estrategia no solo aseguraría una adopción rápida entre los funcionarios públicos y pensionistas, sino que también normalizaría el uso de las CBDCs.
- Introducción gradual y aparentes beneficios: Las CBDCs podrían presentarse como una mejora necesaria y moderna del sistema financiero actual. Se argumentaría que ofrecen transacciones más rápidas, mayor seguridad y acceso más fácil a servicios financieros, lo que persuadiría a la población a adoptarlas. Sin embargo, es importante destacar que estas supuestas ventajas no necesariamente superan las del sistema financiero actual.
- Regulaciones restrictivas sobre el efectivo: Los gobiernos podrían implementar regulaciones que limiten cada vez más el uso del efectivo en la sociedad. Al imponer restricciones sobre el monto máximo que se puede gastar en efectivo o al desincentivar su uso mediante impuestos o cargos adicionales, se crearía una presión adicional para utilizar las CBDCs, aunque estas no ofrezcan ninguna ventaja clara sobre el efectivo.
- Manipulación de crisis económicas o sanitarias: Durante crisis económicas o de salud pública, los gobiernos podrían aprovechar la situación para promover las CBDCs como una medida de emergencia. Presentarlas como una herramienta para evitar la propagación de enfermedades, facilitar el acceso a ayuda financiera o estimular la economía podría generar una rápida aceptación, incluso si no se justifica por ventajas reales sobre otros sistemas financieros existentes.
Estas estrategias no son excluyentes entre sí y pueden ser combinadas para maximizar su efectividad. Los gobiernos podrían utilizar una combinación de estas medidas para asegurar una adopción masiva y efectiva de las CBDCs, adaptándose a diferentes contextos y necesidades de la población. Además, es posible que existan otras estrategias que no se han considerado aquí, por lo que invito al lector a participar con su opinión y aportar nuevas ideas sobre este tema.
Una mirada a las tecnologías descentralizadas y distribuidas
Ante las enormes desventajas que ofrecen las CBDCs, las tecnologías descentralizadas y distribuidas, como la tecnología blockchain y las criptomonedas, ofrecen una alternativa más sólida y resistente. La descentralización inherente de estas tecnologías elimina la necesidad de confiar en una entidad centralizada para mantener la integridad de las transacciones financieras.
En lugar de seguir el camino de las CBDCs, que consolidan el control financiero en manos de instituciones gubernamentales centralizadas, deberíamos considerar el potencial transformador de las tecnologías descentralizadas y distribuidas.
Estas tecnologías ofrecen un camino hacia un sistema financiero más equitativo, transparente y resistente, donde la privacidad y la autonomía individual son fundamentales. En última instancia, la adopción de tecnologías descentralizadas podría ofrecer una mejor alternativa a los riesgos inherentes a las CBDCs, protegiendo así los derechos y libertades de los ciudadanos en la era digital.
Conclusión
Las CBDCs, bajo la apariencia de modernización, podrían fortalecer el autoritarismo y el control social, convirtiéndose en lo que algunos denominan “slavery tokens”.
En este sentido, las tecnologías descentralizadas y distribuidas, como la blockchain y las criptomonedas, emergen como una alternativa más sólida y resistente. Al eliminar la necesidad de confiar en intermediarios centralizados, estas tecnologías ofrecen un camino hacia un sistema financiero más transparente, equitativo y resistente a la manipulación estatal.
Recursos:
[1] El economista: Crédito social chino: el sistema de puntos que ya se exporta a otras sociedades
[2] European Central Bank: Euro digital
[3] Cato.org: Risk of cbdcs
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